LSD
La dietilamida de
ácido lisérgico: LSD o LSD-25 es una droga psicodélica semisintética de la
familia de la ergolina. El LSD es capaz de inducir estados alterados de
conciencia, comparados en ocasiones incluso con la esquizofrenia. También se le
conoce como tripi.
El primer químico en
sintetizarla fue Albert
Hoffmann, que la sintetizó en
1938 y en 1943 descubrió sus efectos por accidente durante la recristalización
de una muestra de tartrato de LSD.
El LSD se trata de un
compuesto cristalino, relacionado estrechamente con los alcaloides del
cornezuelo del centeno, a partir de los cuales se puede preparar
semisintéticamente.
La LSD es sensible al
oxígeno, la luz ultravioleta y la clorina, especialmente diluida, aunque puede
conservar su potencia durante años si se almacena lejos de la luz y de la
humedad, a temperaturas bajas. En su forma pura, es incolora, inodora y
levemente amarga. La LSD suele administrase por vía oral, generalmente en algún
tipo de substrato, como un papel secante, un terrón de azúcar o gelatina.
En forma líquida, puede administrarse mediante una inyección intramuscular o
intravenosa.
EFECTOS:
Los efectos de la LSD
sobre el Sistema Nervioso Central son extremadamente variables y dependen de la
cantidad que se consuma, el entorno en que se use la droga, la personalidad de
la persona etc.
Entre los efectos más
típicos están: contracciones uterinas, hipotermia, fiebre, niveles elevados de
glucemia, erizamiento del vello, aumento de la frecuencia cardíaca,
transpiración, pupilas dilatadas(midriasis), ansiedad, insomnio, parestesia,
euforia, hiperreflexia, temblores, sinestesia, hiperestesia, cambios en la
percepción del tiempo y de la identidad, cambios en el estado de ánimo y
desbloqueo de recuerdos reprimidos.
Cuando la sustancia
se suministra por vía oral, los efectos tardan en manifestarse entre treinta
minutos y una hora y según la dosis, pueden durar entre 8 y 10 horas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario